miércoles, 30 de mayo de 2012

Biomoléculas.

Macromoléculas.
Las macromoléculas se clasifican en naturales y sintéticas. Las primeras son encontradas en los seres vivos, mientras, que las segundas son todas aquellas sintetizadas por el hombre para su bienestar.

Macromoléculas naturales.
Se les conoce así porque son moléculas cuya masa molecular es superior a los 10 000 uma (unidad de masa atómica).
Las macromoléculas naturales son clasificadas en:
Carbohidratos
Proteínas
Lípidos

En este blog les vamos a hablar específicamente de las proteínas...

Introducción.
El termino proteína proviene del griego proteios, que significa primordial o de nivel primario y fue utilizado por vez primera vez por el químico alemán Gerardus Mulder en 1838, para darle un nombre a un grupo especifico de sustancias muy abundantes en las plantas y los animales.

¿Qué son las proteínas?
En general, las proteínas son macromoléculas muy complejas que se encuentran en las estructuras celulares y hacen posible las reacciones químicas del metabolismo celular. Asimismo son las moléculas que definen la identidad de cada ser vivo en el planeta, puesto que son la base de la estructura y función del código genético.

Dato interesante: En una bacteria se encuentran más de 1 000 proteínas diferentes, mientras que en el ser humano existen aproximadamente 10 000.
ESTRUCTURA DE LAS PROTEÍNAS.
Estas biomoléculas - moléculas propias de los organismos vivos- están constituidos básicamente por carbono,  oxigeno, hidrogeno y nitrógeno. En todas las proteínas se encuentra una buena cantidad de nitrógeno, pues a través de él se establecen los enlaces químicos entre las unidades estructurales que las forman.
Las proteínas se consideran polímeros macromoléculas formadas por la unión de pequeñas moléculas que reciben el nombre de monómeros naturales formados por unidades más simples a las que llamamos aminoácidos.
Las proteínas que constituyen los seres vivos están formadas por 20 aminoácidos básicos y se clasifican en naturales y esenciales.
El grupo de los 20 aminoácidos que se encuentra en las proteínas de los seres vivos comparte una estructura general que consta de un carbono central (el carbono alfa α) rodeado de un hidrogeno, un grupo carboxilo, un grupo amino y una cadena lateral R.
Una proteína puede contener desde 1 hasta cerca de 300 aminoácidos unidos a través de enlaces covalentes que reciben el nombre de enlaces pepiticos. Al formarse este enlace se elimina una molécula de agua y siempre queda en un extremo de la cadena de aminoácidos un grupo amino y en el otro, un grupo carboxilo.

AMINOACIDOS ENCONTRADOS EN LA PROTEINA.
LOS AMINOACIDOS (ALIFATICOS) SON:

LOS AMINOACIDOS (AROMATICOS) SON:
LOS AMINOACIDOS (ALCOHOLES) SON:
LOS AMINOACIDOS (CON AZUFRE) SON:
LOS AMINOACIDOS (ACIDOS SON):
LOS AMINOACIDOS (BASES) SON:
LOS AMINOACIDOS (AMIDAS) SON:
EL UNICO AMINOACIDO (INMINOACIDO) ES:
Estructura primaria.
La estructura primaria se define como la secuencia lineal de residuos de aminoácidos presentes, donde cada uno está unido al mediante un enlace peptídico.
El orden que presentan los  aminoácidos en la estructura primaria determina la función y la conformación final que adopta la proteína en los siguientes niveles de organización.
La secuencia de los aminoácidos en la cadena depende del material genético, es decir, el DNA es el que establece de manera específica cómo estarán unidos los residuos en la cadena.
Estructura secundaria.
La capacidad  de giro que tienen los aminoácidos a través de su enlace peptídico, la secuencia lineal se enrolla alrededor de un eje de simetría por lo que la cadena adopta una disposición muy estable en forma de espiral denominada estructura secundaria.  Se conocen dos tipos fundamentales: α- hélice y la β-laminar.
En la estructura  α- hélice la configuración primaria se enrolla de tal manera que toma una disposición helicoidal, donde cada aminoácido se pliega de forma que sigue el giro alrededor de un eje. La hélice así formada es tan estrecha que aparentemente no existe espacio entre los átomos. Cada cuatro enlaces peptídicos se establece un enlace por puente de hidrogeno con una unión peptídica y de esta manera se forman dos puentes de hidrogeno.

La estructura  β-laminar es conocida también como estructura de laminas plegadas. En este tipo de estructura cada lamina a unida a la siguiente por uniones cruzadas de enlaces de hidrogeno en forma de zigzag. Al participar todos los enlaces peptídicos  se obtiene una estructura de gran estabilidad. Generalmente en forma  β existen dos o más cadenas polipeptídicas dispuestas en el mismo sentido  o en sentido opuesto.
Estructura terciaria.
Esta estructura muestra la forma  en que se organizan las cadenas polipeptídicas en el espacio, generalmente a partir de la estructura secundaria. La estructura terciaria se mantiene gracias  a los enlaces entre los radicales R de los aminoácidos y los enlaces peptídicos. Los enlaces que dan origen a la estructura terciaria pueden ser  de diversos tipo: iónicos, por puente de  hidrogeno, por puentes disulfuro o por interacciones hidrofóbicas.

  
Estructura cuaternaria.
En esta estructura están involucradas varias cadenas polipeptídicas distribuidas en el espacio para formar un complejo proteínico. El numero de cadenas polipeptídicas varia, por ejemplo, son dos en el caso de las hexoquinasas, cuatro en la hemoglobina o mas como en la cápsida del virus de la poliomielitis.
Entre otros ejemplos de este tipo de proteínas de estructura cuaternaria están las inmunoglobulinas y la miosina. Representa el nivel más complejo  de proteínas, y podemos encontrarla en enzimas y anticuerpos.

 

Desnaturalizacion de las proteinas.

La desnaturalización de las proteínas se produce  a causa de  diversos factores, entre ellos la polaridad del disolvente, el pH del medio o condiciones extremas de temperatura, que pueden provocar que las proteínas pierdan su estructura original llamada también estructura nativa, lo cual incide en el cambio de las propiedades fisicoquímicas y en su optimo funcionamiento.

    La desnaturalización, en la estructura primaria, interrumpe la secuencia de aminoácidos, mientras que en caso de la estructura secundaria provoca que la proteína pierda todos los patrones de repetición regulares que dan lugar  a la forma α- hélice y se genera formas aleatorias.

    Cuando la desnaturalización afecta a una proteína con estructura terciaria se interrumpen los enlaces covalentes entre las cadenas de aminoácidos, los enlaces dipolo-dipolo entre cadenas laterales polares de aminoácidos y los dipolo inducidos entre cadenas laterales  no polares de aminoácidos.

    En la estructura cuaternaria, la desnaturalización provoca que las subunidades  de proteínas se  separen o que se altere su posición espacial.
Ejemplos cotidianos de desnaturalización de las proteínas:
  • Cuando se fríe o se cuece un huevo; en ambas circunstancias la albumina (clara del huevo)
Se endurece y pierde su característico color traslúcido para formar una masa solida, opaca y blanca.

  •    Otro ejemplo se encuentra en la “nata” que se genera cuando se pone a hervir la leche pura de vaca. El aumento d temperatura provoca que la lactoalbúmina de la leche cambie de liquida a un estado semisólido de color blanco.

Clasificacion de las proteinas.

La estructura de las proteínas incide de manera fundamental en su función biológica. Esto quiere decir que la secuencia de aminoácidos que integra a cada una de ellas y la disposición espacial que adoptan al plegarse es específica para la función que desempeñan en los organismos.
Función estructural:
Las proteínas participan de manera significativa en la construcción de la estructura celular y de todo nuestro organismo.

Proveen soporte a ciertos tejidos; por ejemplo, en los tendones que unen los músculos a los huesos hay una proteína llamada elastina, cuya función consiste en soportar estiramientos entre los músculos. El colágeno  es una proteína que forma los huesos y cartílagos. Algunas proteínas estructurales dan protección, como la queratina, que forma parte de las uñas y el cabellos de los humanos.
Función de regulación:
Además de participar a nivel estructural, las proteínas tienen una gran importancia a nivel de regulación de una infinidad de reacciones químicas celulares.
Hormonas como la insulina son de naturaleza proteica y sin ella no podemos aprovechar los azucares en el organismo.
Otros ejemplos de hormonas reguladoras son la vasopresina; que regula la absorción  de agua en el riñón y la oxitocina; regula la secreción de leche materna y la presencia de algunas actitudes relacionadas con el afecto y cuidado de la prole.
Función de defensa:
También las proteínas participan en la defensa del organismo a través de los anticuerpos e inmunoglobulinas, entre otros.

Las inmunoglobulinas  se encargan, en los vertebrados superiores, de reconocer moléculas u organismos extraños y de unirse a ellos a facilitar su destrucción por las células del sistema inmunitario.
Función de reparación:
Cuando el organismo sufre alguna herida, solo puede repararla si cuenta con las proteínas necesarias de reparación en la escala de lo pequeño. Si existe una hemorragia, las proteínas participan en el proceso de la coagulación frenando la pérdida de sangre, produciendo fibrinógeno, fibrina y finalmente un coágulo. Cuando los procesos de reparación se desequilibran, las células pueden funcionar mal, morir o producir enfermedades como diabetes, Parkinson cáncer.
Función de transporte:
Las proteínas son las encargadas de llevar oxigeno a nuestras células por medio de la hemoglobina, entre muchas otras funciones. Los transportadores biológicos son siempre proteínas.
Función de percepción:
Existen unas proteínas denominadas encefalinas, entre las que se encuentran la Met-encefalina y la Leu-encefalina que se distinguen entre sí  por el aminoácido terminal. Cada uno de ellos son pentapéptidos  (incluyen cinco aminoácidos) que intervienen  en el cerebro en procesos relacionados con la percepción del dolor.

Metabolismo de las proteínas.
 Las proteínas contenidas en los alimentos llegan inalteradas a nuestro estomago. Allí, por la acción del acido clorhídrico, sufren una desnaturalización, es decir, su estructura enrollada se estira. El estiramiento facilita la acción de las hidrolasas proteolíticas sobre ellas.
   La primera en actuar es la  pepsina que es una  proteinasa  enzima que desdobla a las proteínas.
    La acción de la pepsina consiste en el ataque a unos pocos enlaces peptídicos para formar los  peptonas.
   Las peptonas sufren un desdoblamiento en el intestino, en el que actúan tres enzimas pancreáticas: tripsina, quimiotripsina y procinasa.
    La degradación provocada por estas enzimas llega hasta el desdoblamiento de algunos péptidos y algunos aminoácidos. Finalmente, actúa el jugo intestinal por medio de la enzima tripsina, para liberar  los aminoácidos que así pueden ser absorbidos por las vellosidades intestinales.
    Por su parte, la flora intestinal actúa sobre los grupos nitrogenados para elaborar ciertos productos como el indol  y escatol, característico de las heces fecales.
    Como resultado de la degradación de las proteínas, en la orina normal se encuentran algunos productos de desecho como urea, sales amínicas y creatinina.